Cronicario del virus chino: Rigoberto Anzola fabrica tapabocas para defenderse del Covid-19

Desde el pasado 17 de marzo, Venezuela se encuentra en cuarentena, a raìz de la propagacion del coronavirus Covid-19, nacido en China y  que anda suelto por el mundo.

Una de las primeras medidas sanitarias tomada por el gobierno, fue el uso de tapabocas. Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, el uso del tapabocas puede ser muy efectivo para evitar el contagio del COVID-19 a través del contacto de  manos o boca, pues  este virus ingresa al cuerpo a través de las gotículas que una persona contagiada expulsa cuando estornuda o tose. 

Estas partículas entran al cuerpo por las mucosas, ojos, nariz boca, si ha estado cerca de un contagiado sin tener protección o haberse lavado las manos con agua y jabón y luego  tocarse.

En Yaracuy, muy pronto comenzaron a fabricarse, en casa, a mano, con cualquier tela. Los tapabocas se expendìan en las farmacias, pero su demanda , los aumento de precio, por lo que hubo que acudir a los caseros.
Tambièn, hubo personas que se dedicaron a fabricarlos para la venta y generar ingresos. Y aunque las opiniones de especialista sobre su uso estàn divididas: Hay que usar tapabocas.


Deben tenerse varios tapabocas, especialmente el personal de salud. Y en vista de esto Rigoberto Anzola, que desde pequeño de ver a su mamà coser, aprendiò, tenia unas telas guardadas en su casa.
Se puso de acuerdo con Arnaldo Yarza , que en nombre de la Tienda de arte, comprò los hilos y fabricaron 20 tapabocas, y los donaron al personal del ambulatorio Marìa Antonia Bolivar en la avenida Yaracuy en San Felipe.

Tambien, desde MinComunas, el Frente de textileros de Yaracuy fabrica tapabocas para donarlos a las comunidades. A los siete  dias del mes de abril, y 22 de la cuarentena decretada por el gobierno nacional(LP)   


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